Las turbinas eólicas son el epítome de la energía eólica. Gracias al enorme progreso tecnológico, su tamaño ha aumentado considerablemente, pudiendo superar ahora los 100 metros de diámetro. En consecuencia, su potencia también se ha incrementado y una gran turbina de aire puede producir unos pocos MW. Y este tipo de tecnología no solamente es usada en el Norte.
En Etiopía, donde sólo la mitad de la población tiene acceso a la electricidad, el gobierno ha decidido centrarse en las energías renovables en su programa de desarrollo. El parque eólico Ashegoda, situado a 775 kms de Addis Ababa en Etiopía, es el más grande de África. Puesto en servicio en Diciembre de 2011, dispone de 84 turbinas y suma cerca de 400 millones de kWh al año a la red eléctrica nacional.
Este proyecto permite al país reducir sus emisiones de CO2 en alrededor de 300.000 toneladas al año.
Fuente original: Good Planet Foundation