Siempre que tengo un momento salgo de la rutina y me alejo del caos, de la jungla de humo y hormigón, de las caras largas y rostros grises, del egoísmo y de la ignorancia. En resumen, escapo del consumismo desenfrenado en el que nos han metido, mejor dicho, en el que nos hemos metido.
Me alejo, y me acerco a ella. Raudo y veloz corro hacia el bosque, hacia las montañas, hacia la creatividad y paz en estado puro. Corro hacia ella para demostrarle mi amor incondicional, pues con ella me siento feliz, libre y le doy una de mis mejores sonrisas. Cada día se convierte en una aventura, en esa primera cita. ¿Qué perfume se ha puesto hoy? La lluvia, el barro o la nieve son sus vestidos.
Lo que ella no sabe es que a mi eso no me importa, pues para mi ella siempre es hermosa. Siempre me sorprende, siempre toca para mi una de sus mejores baladas de amor.
Puedo parecer un loco, pero loco es aquel que no escucha y que sigue viviendo ignorando que somos animales, y como tales, necesitamos ese contacto vital con la naturaleza. Sal ahí afuera.
Amar y respetar la naturaleza es amar y respetarse a uno mismo.
Aquí os dejo unos consejos para cuidar el planeta de la mano de Greenpeace para ayudarte a ser más consciente de cómo ayudar a que la música siga sonando.
#loveNATURE