En algunos casos, comer más **carne** puede mejorar tu dieta. Pero por encima de cieros niveles también puede provocar riesgos para la salud, como la obesidad y el cáncer. También emite una gran cantidad de gases de efecto invernadero: la ganadería es **responsable del 14% de las emisiones del mundo** a través de la deforestación para crear tierras de pastoreo o para producir la soja necesaria para alimentar a los animales, o debido a las emisiones de metano de los propios animales.
Un kilogramo de carne supone 18 kilos de CO2 – tanto como las emisiones producidas por un coche en 100 kilómetros. Por lo tanto, reducir el consumo de carne ayuda a proteger tu salud y el clima.
Diferentes iniciativas están en marcha para animar a la gente a optar por **dietas más saludables y ecológicas**. Este movimiento se defiende a través del programa “Lunes sin carne”, un programa lanzado en Estados Unidos en el 2003, adoptado desde entonces por muchos otros países.
**Fuente original: [Good Planet Foundation](http://www.goodplanet.org/en/60solutions/feeding-the-world/meatless-mondays/)**